MARIPOSA ROJA
Una mariposa roja sobrevoló la noche
y las rosas abiertas de tus pechos
quedaron al desnudo en la acera.
El borde del acero recorrió
tu cuello transparente y te abriste.
La tarde, y toda la vida,
fue un bajo continuo de violencia.
Habías muerto en febrero, el veintisiete,
con veintisiete años casi no vividos.
Una fría y cínica sonrisa
te cubrió como un último abrigo.
Tus ojos, en el suelo aún, no sabían
como cortar el cordón umbilical
con tu asesino.
Una brisa en tu melena
cerró la noche.
Una mariposa roja sobrevoló la noche
y las rosas abiertas de tus pechos
quedaron al desnudo en la acera.
El borde del acero recorrió
tu cuello transparente y te abriste.
La tarde, y toda la vida,
fue un bajo continuo de violencia.
Habías muerto en febrero, el veintisiete,
con veintisiete años casi no vividos.
Una fría y cínica sonrisa
te cubrió como un último abrigo.
Tus ojos, en el suelo aún, no sabían
como cortar el cordón umbilical
con tu asesino.
Una brisa en tu melena
cerró la noche.
4 comentarios:
me gosta
saudações amigas
Interesante blog, interesantes reflexiones... duro tema...
Voplveré por aquí he intentaremos entre todos que lo más pronto posible este blog carezca de sentido y se cambie por uno de poesia, fotos o viajes.
un saludo.
Maravilloso espacio. Os enlazo a mi blog ya!!
No puedo estar más de acuerdo: El maltrato, o mejor dicho, la violencia de género es un problema de todos, una enfermedad de la sociedad. Con igual valentía tienen que enfrentarlo tanto hombres y mujeres, porque ambos sexos estamos contaminados por la cultura machista que el patriarcado nos ha legado a lo largo de tantos siglos.
Gran iniciativa.
Sobre el poema, sobrecogedor. Transmite fuerza e imágenes potentes. Felicidades al autor/a y a todos por esta iniciativa.
Salud
Hay poemas que tienen cuerpo, ojos, expresión, materia.
Este tiene todo eso. Tiene una mujer encerrada.
Enhorabuena.
Un beso,
Kike
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