Rechinan tus rasgos
por la calle infringida,
como los glúteos
entumecidos de la muerte
vomitan la lluvia
que disciplina tu carne,
que desvincula tu embozo
y te maquilla de Dios.
Tus agotados muslos
eximen el deseo
de raíces fangosas,
que retiran las brújulas
de punzón hipodérmico.
Tu engaño enmudece
en el abrigo de tu entrepierna,
que llora sus faltas
sobre una tierra sin útero,
como el árbol violado.
La vida es un simple latido
la muerte el principio de nada,
una bomba de amnesia
incomprensible discurso del mundo
ensordecedoras sombras
que discuten a oscuras.
por la calle infringida,
como los glúteos
entumecidos de la muerte
vomitan la lluvia
que disciplina tu carne,
que desvincula tu embozo
y te maquilla de Dios.
Tus agotados muslos
eximen el deseo
de raíces fangosas,
que retiran las brújulas
de punzón hipodérmico.
Tu engaño enmudece
en el abrigo de tu entrepierna,
que llora sus faltas
sobre una tierra sin útero,
como el árbol violado.
La vida es un simple latido
la muerte el principio de nada,
una bomba de amnesia
incomprensible discurso del mundo
ensordecedoras sombras
que discuten a oscuras.
Cesc Fortuny i Fabré del "Manual del Asesino Autodidacta"
Sí que es cierto, Cesc, que la prostitución ha de verse como otra forma de maltrato. Creo sinceramente que algo está cambiando, para bien, cuando los jóvenes como tú, así lo percibís. Durante mucho tiempo el "ir de putas", era el colofón de cualquier cena de empresa, la ceremonia iniciática del primer sueldo, un tema de risa en los comentarios a posteriori en muchas reuniones. Eran considerados tíos "raros" los que no participaban del rito y, directamente, no fiables, los que se manifestaban contrarios a ese "ejercicio".
ResponderEliminarGracias por traer aquí un tema oportuno y bien, muy bien, expuesto.
Una abrazo fuerte.
Julio
Las carreteras de España están llenas de burdeles.
ResponderEliminarEn los años setenta, se pretendió que la prostitución, era un tema de libertad y de apertura de miras. Quizás lo pueda ser, pero la falta de regulación, ha conseguido mantener la esclavitud como en ningun otro sector de la sociedad. No es un tema de tradiciones, ni de iniciaciones, es un tema de derechos humanos.
Los que van de putas, simplemente me dan asco.
Un abrazo.
Hay mujeres que se dedican a este ejercico y nadie les obliga, así que la frase de "la prostitución es otra forma de maltrato" necesita ser matizada imperativamente hablando. Si tienen algún problema ellas se lo han buscado, que ya son mayorcitas para saber que se van a encontrar por el mundo. Y esto se puede aplicar a todo, quien juega con fuego acaba quemandose.
ResponderEliminarEn cuanto a asco, a mí me dan asco ellas, que se aprovechan de aquellos hombres que, por varias razones (y espero que puedan imaginar) nunca serán el objetivo de ninguna dama.
Y más asco me dan cuando se pasan unas mínimas condiciones sanitarias por el forro (que se pueden respetar incluso fuera de la ley). Aunque esto último también se lo aplico a cualquier cliente.
El sexo debería ser un derecho, no un privilegio. Aunque eso solamente es posible es un mundo utópico.
En cualquier caso, este oficio debería estar regulado. Como va a existir pase lo que pase, que mejor que de forma legal. Solución que a mí no me satisface, pero es la que mejor se me ocurre.
Saludos.
pero anonimo debes tener en cuenta de que muchas mujeres lo hacen por necesidad no por amor al arte, muchas de ellas tienen unos hijos a su cargo y por cuestiones de desempleo deben ejercer la prostitucion, asi que date cuenta que si puede ser unmaltrato
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