Es un ir y venir
Nunca sé donde estoy
Hoy temo a aquello que ayer creí vencer
Y las heridas vuelven a renacer
Nunca sé donde estoy
Hoy temo a aquello que ayer creí vencer
Y las heridas vuelven a renacer
No te creeré más
Porque tus palabras no me sirven
Tus acciones han hablado
Y esas mismas harán que te castiguen
Escozor irremediable en medio de lagunas azules
Un dolor perpetuo, en calma, durmiendo.
Que a veces se enrabia y se manifiesta
Y me recuerda aquel sufrimiento
Los malos sueños visitan mis noches
Me torturan con una realidad que no existe
Pero que en algún espacio en mí se esconden
Quiero hacer morir mi subconsciente
Me torturan con una realidad que no existe
Pero que en algún espacio en mí se esconden
Quiero hacer morir mi subconsciente
Encontrar de nuevo mi camino
Mirar atrás y no recordar
Mirar atrás y no recordar
Avanzar sin miedo, esperando, esperando…esperar.
Begoña: Gracias por unirte a este intento. La poesía cuando es intensidad y refrenda lo vivido, amplía la luz para ue otros miren. Somos agua y palabra, una condición necesaria para la vida.
ResponderEliminarUn placer tenerte aquí.
Mi beso desde Asturias.
Julio