Los hombres no debemos considerar este horror como un problema de las mujeres. Todos debemos implicarnos, denunciando, dando la cara,apoyando. Ellas solas no pueden.
sábado, 6 de noviembre de 2010
Ahora mismo
Yan, Pei-Ming Eros center, Prostitute in Frankfurt
¿qué esperáis os responda el niño pescador
doblado por el peso de la criba?
¿qué argumentan los niños labradores
si tienen en la boca un anzuelo?
¿qué esperanza canta la niña prostituta
celeste vagina con olor a garaje?
algo tremendo sucede ahora
ahora mismo mientras nos miramos
dos niños han robado su limosna al hambre
y suben
están subiendo el último tramo de la escalera
que la niña puede ver
desde la puerta entreabierta
Julio Obeso
RAZONES.
Cuando empecé a pintar este cuadro, sentía una enorme opresión en mí, hice un repaso a mi vida, a mi educación y poco a poco fui reflejando en él, como me sentía y las cosas que estaban provocando ese estado. “El Paraguas Rojo”, fue un símbolo para expresar la gran carga, llevada con tiento y equilibrio; esa que nos van imponiendo desde pequeña, se buena, honrada, responsable, buena madre, buena esposa, callada y HUMILDE; más las que te impones tu, MUJER, capaz de todo, trabajadora en casa, organizada, limpia, la mejor madre, la mejor esposa, aunque se te atraganten cosas; la mejor profesional, aunque revientes de puro cansancio; la mejor amiga,… Por eso el paraguas llega al suelo, es tan grande que tienes que sujétalo con las dos manos.
Tus hijos se hacen grandes, van a su bola y a sus intereses, lo normal y para ellos eres su madre, pero no te ven. Para tu marido eres la esposa, la de siempre, y deja de verte. Y tú, estás tan dedicada a todo, para llegar a final de mes, para que no les falte de nada a los niños, a él para que no haya broncas, que empiezas a sentirte invisible.
Y para colmo de males, como en el camino has perdido la autoestima y la personalidad, aparece el olvido, ni siquiera sabes lo que te gusta y solo sabes caminar dando un pasito detrás de otro sin salirte de la línea marcada, haciendo equilibrios para que nada se altere.
Mis mujeres de Paraguas Rojo, todas tienen un problema para resolver que es mirarse a sí mismas y descubrirse poco a poco para volver a encontrarse.
A veces es muy difícil porque nadie quiere perder en este empeño ninguna posición ganada y una se encuentra con la realidad y es tan dura como una gran bofetada, la desorientación es tremendamente poderosa y la caída al más profundo abismo; pero, os puedo asegurar: qué se sale, porque existe en lo más profundo de tu ser un “Yo” con esperanza, y hay algo que te dice que está aquí por alguna razón y cuando te despiertas , es el momento de empezar a caminar y encontrarse y encontrar esa maravillosa razón de vivir y ser tu misma.
Charo Acera.